
La suma de tráfico y contaminación en el hogar, provoca mayor riesgo de asma infantil que cualquiera de estos dos factores por separado.
El asma, una enfermedad alérgica de las vías respiratorias, siempre debería desarrollarse por la exposición a antígenos en el aire que inhalamos constantemente.
Sin embargo, el hecho de que el 94% de la población occidental no desarrolle la enfermedad, sugiere que hay mecanismos desconocidos que protegen al tracto respiratorio para que no desarrolle una respuesta alérgica.

Cada vez más gente sufre de alergia y de asma y una de las teorías acerca de las causas este fenómeno es la hipótesis de la higiene, que sostiene que vivimos en un mundo demasiado limpio, por eso los niños no están expuestos a los gérmenes que entrenarían a su sistema inmunitario para distinguir entre lo inofensivo y lo dañino.