
Cuando el poeta Walt Whitman escribió contengo multitudes, estaba hablando metafóricamente, pero al mismo tiempo decía una verdad como un templo. Porque cada uno de nosotros lleva en sus intestinos millones y millones de bacterias. Tantas que son diez veces más que las células que forman nuestro cuerpo. Esto es normal y en esta relación ambas partes salen beneficiadas, bacterias y humanos.
Ahora científicos de Estados Unidos, Japón y Alemania han visto que estas bacterias pueden jugar un importante papel en el control de la inflamación alérgica.
En su investigación usaron antibióticos para eliminar las bacterias de los intestinos de los ratones. Luego los expusieron a ácaros y comprobaron que presentaban una respuesta alérgica que superaba la de los ratones no tratados.
Lo mismo ocurrió con ratones que no tenían bacterias porque habían sido criados en un ambiente estéril.
Lo que indica que las bacterias intestinales desempeñan un importante papel en las reacciones alérgicas.
Ahora los científicos deberán estudiar los distintos tipos de bacterias que viven en nuestros intestinos para ver cuáles son las que tienen efectos beneficiosos y quizá con el tiempo puedan crean unos probióticos que disminuyan nuestras reacciones alérgicas.
Fuente: Penn Medicine. Foto: David Hill, Ph.D., Perelman School of Medicine, University of Pennsylvania.
En la misma línea aparecía hoy un artículo en un blog de ciencia: http://ciencia.ara.cat/centpeus/2012/03/26/una-mica-de-bruticia-per-la-salut/
Está en catalán, pero con el traductor se entiende muy bien
Hola Meritxell:
Efectivamente, el artículo que citas hace también referencia a la hipótesis de la higiene, que cada vez más estudios respaldan como puedes ver en algunos de nuestros artículos, como Confirmado: los gérmenes protegen de las alergias o Un poco de suciedad puede ser bueno para los niños.